un sueño océano

"SE PUEDE CUMPLIR, POR UNO PARECIDO A TI, PERO UNO QUE NO ES TU'".

Esta es la respuesta críptica que recibimos del Oracle, cuando finalmente buscamos su ayuda. "Nosotros" (en este historia-sueño) somos un equipo de expertos de la primera clase (científicos del nivel mas alto, sino también algo así como canalizadores o empáticos: curadores). Nuestra tarea es sanar las aguas de este mar, en cuyo borde vivimos. Algo está fuera de balance en sus aguas, y toda la vida en ella está sufriendo, y gran parte de ella se está muriendo. Uno del equipo ya ha pasado horas de buceo, explorar, la ejecución de pruebas, pero no puede sondear lo que debe hacer. El Oracle que consultamos es nuestra fuente confiable de la sabiduría, de la autoridad, de saber. Es una parte sistema informático de alta tecnología, y otra parte voz antigua. O tal vez, es voz antigua, y la accesamos (o traducimos?) por medio de una interfaz computadora de alta tecnología. Vemos las pantallas multicolores centelleantes, mientras sus escaneares de los bancos de datos se ejecutan a través de todas las respuestas posibles a nuestro problema, y ​​se reducen al fin en una sola imagen: una tortuga del mar. Estamos todos asombrados. Esperábamos algo más complejo. Pero vemos una sombra de semejanza: esta criatura es como nosotros, pero es otra. Reconocemos en ella algo de similitud física - una criatura que respira, camina, y nada - y esto mucho mejor que nosotros, porque se hace para el océano. Pero también percibimos un parentesco en su inteligencia, en su conciencia.

Salimos desde los computadores, dirigimos de nuevo a la orilla, y encontramos un nido de huevos de tortuga. Hay por lo menos un centenar de ellos. Tomamos uno de la parte superior (es anormalmente grande, como un huevo de avestruz). Decidimos que la necesidad es tan grande que vamos a intervenir: damos la cáscara un golpe muy ligera, sólo para agrietarla, para acelerar su eclosión. Esto me molesta, incluso en el sueño. Pero la conciencia de la necesidad inminente de toda la vida que nos rodea me deja con la esperanza de que seremos perdonados, en el gran esquema de las cosas. La tortuga emerge casi inmediatamente. Es más grande incluso que era el huevo, aproximadamente 20 centimetros de ancho, y un verde oliva, casi transparente, gomoso. Él es consciente de su misión: Lo veo en la mirada sombrío y sabio que me da desde ojos oscuros, tan sólo unos tonos más profundos que las profundidades verde-marrón-oro del agua a nuestros pies. El agua esta profunda, una  caída directamente desde la orilla rocosa donde nos encontramos, así que lo pongo en mi pie para un lugar de partida. Mientras se posa allí por un momento, me siento un solo latido de su corazón a través de mi zapato, mucho más fuerte que lo que hubiera imaginado a partir de una criatura pequeña. Luego se sumerge en el agua, que está lleno de remolinos de colores como un ágata oscuro, y se ha ido. Encontrará nuestras respuestas, y nos ayudará a lograr la curación que nuestro mundo debe tener.

Los interpretaciones de los sueños siempre permiten espacio para múltiples niveles de entendimiento. Así como la posibilidad de ver cada ser en el sueño como un aspecto del yo. Un enfoque que nunca me deja de fascinar.

Al nivel personal: este sueño expresa mi gratitud por el "equipo" de personas excelentes que son parte de mi vida en este momento. Cuyo bienvenida, aceptación, y colaboración en varios frentes que me está ayudando a formar la curación mi alma busca. Quiénes me recuerdan a diversos aspectos de mí mismo con los cuales tengo que estar conectada. Que son como yo, y tan maravillosamente a diferencia de mí. Quiénes me avisen: la tarea es desalentadora, pero se puede hacer.

A lo colectivo: seguramente nosotros todos necesitamos el aporte y la pericia de uno al otro. Seguramente estamos todos los expertos con nuestras limitaciones, los buscadores desconcertados, y los curadores competentes, a la vez. Seguramente somos la interfaz de complejidad infinita, que transmite la voz del Oráculo. Y sin duda, somos el océano luchando, sufriendo, esperando ...